El parlamento venezolano, dirigido por la oposición, prohibió el martes una criptomoneda "petro" promovida por el presidente socialista, Nicolás Maduro, calificándola como un esfuerzo por hipotecar ilegalmente las reservas petroleras del país, que tiene problemas de liquidez. Los expertos en criptomonedas dicen que la mala gestión de Venezuela de su propia economía, combinada con la histórica falta de respeto por los derechos de propiedad privada por parte del Partido Socialista, probablemente dejará a los inversores desinteresados.