Airsense 10 es una máquina de CPAP (las que se usan para la apnea de sueño, que sólo bombean aire pero no lo aspiran) cuyo fabricante asegura que no se pueden adaptar para convertirlas en respiradores. Un investigador de seguridad ha analizado el Airsense 10 y encontró un modo en su firmware que le permite bombear aire tanto dentro como fuera de los pulmones del usuario. Ha liberado Airbreak, un parche para romper la cárcel para que el Airsense se convierta en un sustituto limitado del ventilador.

Las máquinas CPAP (continuous positive airway pressure) soplan aire a la tráquea de los pacientes para mantener siempre abiertas las vias respiratorias. Normalmente los datos generados por estas máquinas y su configuración están protegidos por DRM y sólo los médicos pueden acceder a ellos (llevándoles la tarjeta SD cada seis meses). Un hacker ha pasado miles de horas analizando el DRM y ha creado SleepyHead, totalmente open source, que da a los pacientes el control completo de sus máquinas.