Los libros y la imprenta han sido tan decisivos para la humanidad que a veces podemos olvidar que lo importante no es el papel o la tinta, sino las palabras e ideas que contienen. Desde sus orígenes, Internet siempre ha sido el entorno natural para los libros electrónicos, un lugar donde los textos contenidos en los libros y las imágenes en su caso, pudieran compartirse, independientemente del dispositivo o la pantalla donde se leyeran.

Hace un par de meses me pasé por sedice.com, un foro de literatura en el que he pasado grandísimos ratos, aunque últimamente tenía poca actividad (como casi todos). Estuve releyendo muchos hilos míticos, especialmente los de literatura terrorífica, donde tanto aprendí. Disfruté releyéndolos. Sedice formaba un grupito de gente que... ¡eran los mismos! desde finales de los 90, en casi todos los foros de España. Gente como darkreader, Tyla u ollonois, con los que coincidí también en pasadizo.com, o en cinefantástico.

Clarkesworld es una reputada revista estadounidense de literatura de ciencia ficción y fantasía que lleva casi 20 años publicando autores premiados o nominados a los principales galardones de la literatura 'de género' (Hugo, Nebula, World Fantasy, Sturgeon, Locus, Stoker...). Los autores valoran de Clarkesworld que sea una de las publicaciones más rápida a la hora de leer y responder los relatos de los autores que aspiran a publicar con ellos, así como una de las que mejor pagan.

No cualquier texto digitalizado es literatura electrónica; para serlo, debe poner de manifiesto el soporte y el medio en el que existe. Este ensayo presenta varios ejemplos sobresalientes, creados por artistas latinoamericanos, que evidencian el código, el algoritmo y la tecnología, al tiempo que muestran sus límites y juegan con la posibilidad del error, el glitch, la alteración, la participación y lo ininteligible.

Hace mucho tiempo los escritores tenían unas pocas herramientas básicas: una máquina de escribir, un bloc de notas, un lápiz y una buena colección de diccionarios. Ahora tenemos ordenadores, programas especializados, aplicaciones de escritorio y otras en la nube. En pocas palabras, disponemos de una variedad infinita de herramientas gratuitas para escritores. Al final, se trata de escoger la que te resulte más cómoda o, simplemente, la que más te guste.

¿Fue realmente Borges un visionario de internet? ¿Se puede considerar premonitorio su relato ‘La Biblioteca de Babel’, escrito en 1941? ¿Intuyó, mucho antes que Tim Berners-Lee, la idea de una vasta red capaz de albergar todos los frutos del conocimiento humano? Varios libros y artículos periodísticos han indagado en los últimos años en cómo las obras del escritor argentino Jorge Luis Borges, fallecido en 1986, prefiguraron la realidad virtual total en la que vivimos.

En 1945, el pionero autor de ciencia ficción Arthur C. Clarke redactó un documento en el que proponía que las estaciones espaciales fueran utilizadas para transmitir señales de televisión, una declaración escrita en un momento en el que la televisión todavía no se había empezado a comercializar de forma masiva.

El clásico del escritor británico sobre un gobierno obsesivo con el control se escribió hace 70 años. Hoy, muchos de los artefactos que utilizamos a diario se parecen a lo que se describe en el texto.

La plataforma web Mobbyt creó una serie de videojuegos educativos en el marco del VIII Congreso Internacional de la Lengua Española (CILE), que se desarrollará del 27 al 30 de marzo en la ciudad de Córdoba.

Para producir al por mayor y a buen precio “literatura de todas clases, ya sea en prosa, ya en verso” y “abastecer al mundo entero de novelas, dramas, poemas, etc.”, una compañía de nombre impronunciable fabricaba unas increíbles máquinas capaces de escribir textos pertenecientes a géneros transformados por el componente artificial del proceso, como la galvanostiquia (la versión mecanizada de la poesía) o la electroprosa.

“100 razones para ser machistas y no avergonzarse de ello” es un libro, no una broma (de pésimo gusto), sino un “ejemplar” de un expositor extranjero que llegó a estar por dos días en una estantería de la Feria Internacional del Libro de La Habana. Las reacciones de muchos cubanos se hicieron sentir de inmediato en las redes sociales. Las denuncias llegaron a la presidencia de la Cámara del Libro quien retiró el manual.

Consejos para que cualquier editorial logre indexar sus productos en buscadores.

Si pudiéramos viajar al pasado, y decirle a alguien del siglo XIX, que seremos capaces de cargar miles y miles de libros en un dispositivo del tamaño de un pequeño libro de bolsillo, y que además, apenas pesa. De seguro, nos catalogarían de locos. Y es que hoy por hoy somos capaces de albergar mucho más que libros en nuestros teléfonos móviles. Gracias a las aplicaciones, son capaces de llevar a cabo una gama casi ilimitada de actividades. Es por eso que aquí te hablaremos de las apps que todo gran amante de la literatura debe llevar consigo.

De vez en cuando, algún informático con dotes para la escritura quiere dejarse llevar y dejar su sello personal. Precisamente el soporte de software es un trabajo concienzudo y en muchos casos invisibles, de ahí que algunos quieran lanzarnos un guiño después de horas y horas picando código. Claro que también pueden tratarse de estrategias de márketing que ayuden a aportar valor de marca. Cualquier lugar es válido para darse un poco de publicidad, más si es gratuito.

¿Qué libro está ambientado en tu provincia? ¡Descúbrelo! A continuación, descubrirás qué libro hemos escogido por cada provincia española y te explicaremos, a rasgos generales, sobre qué trata o en qué rincones de la provincia ha estado ambientada la novela.

Hace poco se publicó un libro inédito de Unamuno, un texto que se centraba en los viajes que este poeta y filósofo realizó junto a su tío por Europa, en 1889, cuando contaba con 25 años de edad. En el viaje, visitaron Italia, Suiza y París, entre otros lugares. Parece ser que Unamuno, antes de partir de España, adquirió en Barcelona los dos cuadernos de notas que llenó con sus experiencias y pensamientos. Por lo que se puede deducir, en aquel tiempo los cuadernos de notas debían ser notoriamente más voluminosos que los actuales, porque el libr

Un importante artículo sobre la habilidad de las computadoras para analizar libros de ficción y encontrar patrones en ellos. Ciertamente, las computadoras no pueden leer libros de forma consciente como nosotros, pero esto no evita que se puedan obtener datos interesantes mediante la ventaja de procesar miles de libros en poco tiempo. Todavía hay muchos problemas con la automatización de estos proyectos; no obstante, siguen mejorando con el tiempo.

Durante una entrevista para la televisión, George R. R. Martin confesó que todavía utilizaba un ordenador sin conexión a internet con un procesador de texto antiguo llamado WordStar. Creía que esto era su “arma secreta”, e indicó que la falta de distracciones de la que disfrutaba gracias a esa tecnología era lo que le había permitido escribir historias tan largas.

La inteligencia artificial ha evolucionado lo suficiente que ahora puede ocuparse de las tareas diarias , conducir un coche , funcionar como un fiel compañero de compras , y ... escribir un guión? Un proyecto de cine independiente de terror de Jack Zhang , según los informes, fue producido en parte) por una herramienta de software de inteligencia aumentada.

Todo comenzó hace un par de meses en un hilo de Reddit sobre la portada de la novela de George Orwell 1984. De pronto, un usuario identificado como 9MOTHER9HORSE9 realizó un comentario en el que hablaba, sin venir a cuento, sobre el programa de control mental de la CIA Mk Ultra. Algo llamó la atención de los lectores. El usuario mencionaba en su breve texto a unas “interfaces de carne” y terminaba con la enigmática frase sobre el proyecto secreto: "Todo el asunto debía ser eliminado, pero la tecnología que ha creado ha resultado revolucionario"

Google ha lanzado recientemente un experimento fruto de la colaboración entre Google Creative Lab, su área dedicada a proyectos experimentales y Visual Editions, una editorial radicada en Londres. Su nombre, Editions at Play; su objetivo, lanzar una serie de libros electrónicos que no se pueden imprimir.

Alexander von Humboldt, Oliver Sacks, Lisa Randall, Ada Lovelace...