Tras la guerra de megapíxeles, lectores de huellas o aquella que enfrentaba resoluciones de pantalla, ahora los fabricantes luchan por demostrar quién tiene el teléfono más delgado. Y tenemos nuevo ganador, ya que Oppo ha presentado el increíble R5, un terminal de solo 4,85 milímetros y sin protuberancia en el objetivo de la cámara trasera.