No ha sido un gran año para la televisión. Ha habido muchas cosas que picotear, sin duda, e incluso algunos tesoros. Pero en comparación con la forma en que 2017 parecía atraer nuevos clásicos con sorprendente regularidad (hasta el punto de no poder clasificarlos cuando llegó el momento de hacer una lista), 2018 ha presentado una gran cantidad de espectáculos donde mi recomendación viene con una advertencia , o donde me encanta, pero muchos de mis camaradas críticos lo desprecian, o algo así.(...)