El pasado martes, el mayor suministrador del sur de California (Estados Unidos) tuvo que adoptar medidas excepciones para hacer frente a una sequía histórica en el estado del oeste estadounidense. ¿La exigencia? Hacer que cerca de seis millones de personas solo puedan regar en exteriores una vez por semana. Esta es una de las sucesivas medidas que han venido imponiendo las autoridades estatales en los últimos tiempos. La emergencia por sequías en California ya encadena su tercer año consecutivo.