En Podemos sueñan con un tripartito en Cataluña, así como con un País Vasco en el que puedan gobernar con Bildu, con todo lo que eso significaría para la política española. Es un elemento esencial de la política contemporánea, la forma de las peleas por el poder ha llevado a olvidar las ideas de conjunto: todos miran por sí mismos. El movimiento de Iglesias al trazar alianzas con ERC y Bildu sigue por ese camino, ya que permite forjar un frente de izquierda que impulse el PSOE hacia otras posiciones, al tiempo que los beneficia directamente.
