El Gobierno de coalición nunca abandonó la idea de llevar a cabo una importante subida de impuestos. Ya Montero lanzó una advertencia a comienzos de 2020, cuando dijo que consideraba que había margen para incrementar la recaudación vía subida de impuestos hasta que España alcance una presión fiscal similar a la de la media de la eurozona, de la que nos separan seis puntos sobre el PIB. A lo largo de estos meses, desde entonces, han repetido esa misma cantinela, que ahora mantienen. Esos seis puntos equivalían en 2020 a 64.582 millones de euros.