Las nuevas realidades sobre el terreno han hecho naufragar las conversaciones diplomáticas entre Egipto y Etiopía. Ahora, El Cairo ha adquirido armas que coinciden con su retórica política.

El frágil equilibrio del federalismo étnico en Etiopía se salió de los enfrentamientos comunitarios puntuales con la guerra de Tigray. Desde ese momento, diversos nacionalismos, luchas por el poder e insurgencias se disputan la hegemonía federal, regional y local. Entre ellos se encuentra el tradicional choque por la frontera de los Estados de Afar y Somali, que hasta ahora había quedado opacado por una suerte de arreglos para la demarcación.

Mapa de zonas de control en el conflicto entre las fuerzas Armadas de Etiopía, las FFAA de Eritrea, el TDF de Tigray y el ejercicio para liberación de Oromo. Hace 3 días. El TDF controla a Nefas Mewcha, tras fuertes enfrentamientos a lo largo de Gayint.

Etiopía denunció el jueves una "alianza destructiva" revelada esta semana entre los rebeldes de Tigray, devastada por la guerra, y un grupo de Oromia, la región más grande del país. "Nuestra alianza se basa en el entendimiento mutuo de que la dictadura (del primer ministro Abiy Ahmed) debe ser eliminada ", dijo el portavoz del ejército de liberación de Oromia. "En este punto, compartimos información y coordinamos la estrategia".

La llamada a las armas se produjo en una declaración de la oficina del primer ministro Abiy Ahmed: "Ahora es el momento adecuado para que todos los etíopes capaces y mayores de edad se unan a las Fuerzas de Defensa, Fuerzas Especiales y milicias para demostrar su patriotismo". La declaración se produjo seis semanas después de que el gobierno declarara un alto el fuego unilateral en la región norteña de Tigray el día en que las fuerzas de Tigrayan retomaron la capital regional, Mekelle, en un cambio radical después de ocho meses de conflicto.

Con la atención del mundo centrada en otra parte, un conflicto que amenaza la estabilidad de todo un continente ha pasado desapercibido. El conflicto de Tigray en Etiopía se ha salido rápidamente de control, diezmando sus Fuerzas Armadas y enviando al país al borde del colapso. Con pocas opciones restantes, el ahora desesperado Gobierno de Etiopía está retirando a sus efectivos de mantenimiento de la paz de docenas de puntos críticos en África, abriendo la puerta para que se reactiven los conflictos en todo el continente.

Amhara, la segunda región más grande de Etiopía por población, se ha visto envuelto en ciclos de masacres por motivos étnicos en los últimos años. Tan recientemente como en abril, alrededor de 100 personas fueron masacradas en Ataye, una ciudad en Amhara rodeada de asentamientos étnicos Oromo. Esta violencia tanto dentro como fuera de Amhara ha provocado temores de una persecución generalizada por motivos étnicos y advertencias de los líderes políticos de Amhara de un genocidio contra su grupo.

Un nuevo mandato de cinco años para el primer ministro etíope, Abiy Ahmed, según los resultados del sábado de una victoria aplastante en una votación parlamentaria histórica y dos veces retrasada en la que el gobernante Partido de la Prosperidad del país obtuvo 410 escaños de 436. Un segundo lote de votaciones está programado para el 6 de septiembre para el resto. Sin embargo, no hay una fecha de votación para Tigray, donde ocho meses de agotador conflicto en Tigray ha golpeado la reputación global de Abiy y ha generado temores de una hambruna

En un sorprendente giro en la devastadora guerra civil de ocho meses en la región de Tigray, en el norte de Etiopía, el gobierno etíope declaró un alto el fuego inmediato y unilateral después de que las tropas de Tigrayan retomaran la capital regional, Mekelle, el lunes por la noche. El contraataque de Tigrayan fue un gran golpe para el primer ministro etíope, Abiy Ahmed, quien había declarado la victoria a fines de noviembre del año pasado cuando el ejército de Etiopía invadió la ciudad de medio millón de habitantes.

Etiopía vota el lunes en elecciones parlamentarias muy esperadas, ya que el país, el segundo más poblado de África, está sacudido por la violencia, particularmente en la región de Tigray. Cuando llegó al poder en 2018, trajo un viento de esperanza y unidad a este país del Cuerno de África con más de 80 etnias, el primer ministro Abiy Ahmed prometió celebrar las elecciones más democráticas que Etiopía haya visto. En cuanto a los 38 distritos electorales de Tigray, donde la guerra se ha desatado durante más de siete meses, no se votará.

En medio de una disputa diplomática con Etiopía sobre su plan para llenar el embalse de su presa. Egipto y Sudán inician ejercicios militares en medio de crecientes tensiones. Fuerzas terrestres, navales y aéreas de ambos países participaron en ejercicios militares denominados “Guardianes del Nilo”. Los ejercicios tienen como objetivo impulsar la preparación para el combate y reforzar los lazos entre ambos países.

El domingo, más de 10.000 personas se manifestaron en la capital de Etiopía, Addis Abeba, para denunciar la "intromisión" de los Estados Unidos de América en los asuntos del país. La semana pasada, Washington anunció sanciones a varios funcionarios etíopes y eritreos por el conflicto en Tigray. El jueves, los manifestantes en una marcha pro junta militar en Bamako, la capital de Malí, ondearon banderas rusas mientras mostraban su apoyo al coronel Assimi Goita, quien se declaró presidente después de destituir al líder transitorio.

Entrevista con Sean Williams sobre su reciente reportaje sobre la guerra en la región etíope de Trigay. La intervención militar en Tigray es una incursión militar en curso iniciada en noviembre de 2020, cuando estalló un conflicto civil en la región de Tigray de Etiopía entre las autoridades regionales y el gobierno federal. A 2 de febrero de 2021, seguían desaparecidos 20 000 de los refugiados eritreos en Tigray, en su mayoría de los campamentos de Hitsats y Shimelba, según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.

En este punto, el gobierno etíope ha ganado en gran medida en su batalla con el Frente de Liberación del Pueblo de Tigray (TPLF), el partido que sirvió hasta ahora como gobierno del estado de Tigray, y que una vez dominó la política en todo el país etíope. El gobierno federal y los aliados han capturado desde hace mucho tiempo la capital del estado y las principales ciudades, aunque las fuerzas del TPLF continúan resistiendo en otras áreas. Entre los aliados del gobierno federal etíope se encuentran el vecino estado etíope de Amhara y Eritrea.