Porque la contaminación mata y la justicia ya lo avala. Un juez de Londres ha sentenciado que la niña de nueve años Kissi Debrah, que vivía a solo 25 metros de una carretera con altos niveles de polución, murió por respirar aire contaminado.
La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, ha afirmado que el presidente saliente, Donald Trump, podría ser cómplice de las muertes ocurridas durante el asalto al Capitolio que se saldó con cinco víctimas mortales.