Un estudio de la Michigan State University afirma que los osos panda en libertad pasan bastante tiempo juntos, y no son tan solitarios como se pensaba hasta ahora. Para realizarlo pusieron collares GPS en varios osos y estudiaron sus movimientos durante dos años. También han comprobado que los pandas recuerdan bien dónde crece mejor el bambú y vuelven al lugar cuando saben que vuelve a crecer.