La primera víctima de un tiburón, al menos, registrada, es un hombre cuyo esqueleto presenta casi 800 heridas. Sus restos los halló un grupo de científicos británicos. Sucedió en el mar interior de Seto, en el archipiélago japonés. Según el análisis, el hombre era joven o de mediana edad. Y vivió entre los años 1370 y 1010 a.C.