Chris Birch, trabajaba, le gustaba salir a tomar cervezas con los amigos, ver todos los partidos del domingo y además tenÃia una relación con una chica y estaba pensando en casarse.Hasta que un día tuvo un derrame cerebral que lo ha cambiado.Desde entonces todo fue diferente. Aunque suene increÃíble,ha renunciado a su trabajo, comenzado a odiar los deporte... y se hizo gay. La madre declara que apenas reconoce a su hijo, que ahora trabaja como peluquero. "Cuando miro mis fotos antes del accidente, soy una persona totalmente diferente"