Investigadores rusos obtuvieron un recubrimiento para carreteras que prácticamente no se agrieta y puede ser utilizado sin mantenimiento entre 10 y 15 años. La acción del agua de tanto congelarse y derretirse provoca grietas en las vías, por lo cual resulta un logro relevante este material, cuya vida útil duplica a la del utilizado tradicionalmente, con un costo similar. El nuevo producto se logra de la unión de materiales diferentes, al cubrir a presión el asfalto colado con una delgada capa de cascajo plastico