Se van conociendo nuevos datos sobre la joven de Baeza que denunció a sus padres por detención ilegal que no coinciden con la versión que habían trasladados los medios. La menor se encontraba recluida en un chalé en construcción ubicado "en medio del campo", adonde su padre le llevaba comida "dos días a la semana", si bien el resto del tiempo estaba "sola", lo que le hacía "sentir miedo". Por ese motivo, huyó y un vecino la llevó a la Guardia Civil, donde llegó con un hematoma en el ojo.