Una turista estadounidense murió atacada por un oso en los Cárpatos Meridionales en Rumanía, cerca de la localidad de Busteni, cuando se hallaba en una conocida ruta a la altitud de más de 2000 metros, informaron hoy fuentes policiales. Katrina Evans, de 31 años, fue muerta anoche por el animal con una mordedura fatal en el cuello, mientras que otras dos personas resultaron heridas.