Manning le confesó a un completo desconocido, el reputado 'hacker' norteamericano Adrian Lamo, que había robado todo un arsenal de información clasificada que había puesto en manos de WikiLeaks. "Era información muy vulnerable. Y, bueno, se la mandé a WikiLeaks. Dios sabe lo que sucederá a partir de ahora. Espero que haya una gran discusión mundial, debates, reformas. Si no es así, estamos condenados como especie", le dijo.