Las cifras son mucho más modestas, pero el modus operandi era, en apariencia, el mismo. Bernie Madoff estafó 68.000 millones de dólares y Germán Cardona, supuestamente, 300; el primero está en prisión, cumpliendo una condena de 150 años de cárcel, por la mayor estafa piramidal con inversiones bursátiles de la historia; el segundo permanece encarcelado aunque de manera preventiva, bajo la acusación de haber engañado a sus clientes mediante ese mismo sistema en forma de pirámide, pero con la compraventa de divisas.