Una fina lámina de plástico que emite luz con una intensidad que refleja la cantidad justa de presión aplicada a su superficie, ofrece pistas sobre cómo serán las interfaces para computadoras flexibles del futuro. Sus creadores afirman que las próximas encarnaciones de la interfaz se podrían usar para robótica, guardabarros de autos, pantallas móviles e incluso “papel de pared interactivo”. Traducción en
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