Todo es susceptible de empeorar, y parece que desde hace ya un tiempo se está cumpliendo a rajatabla en la zona euro en general, con continuos ataques a la moneda única, y en España en particular, con un sector financiero en fase de rescate y una economía seudointervenida. Por eso, cuando alguna compañía tiene sobre su mesa planes positivos, aunque solo sea en estudio, se convierten en un gran acontecimiento, más si la noticia procede del sistema financiero, el sector más vapuleado de los últimos meses.