Las dependientas de la joyería «Diamanten», junto con la esposa del dueño, se preparaban para cerrar cuando un encapuchado entró en el local y comenzó a darles puñetazos. Con la cabeza de una de ellas rompe el cristal interior del escaparate y se llevó, en menos de medio minuto, un botín valorado en medio millón de coronas, unos 67.000 Euros. Ahora el marido cuelga el video en YouTube y dice: «Este hijo de puta entró en mi tienda e hirió a mi esposa y a mi personal. Ayudadme a localizarlo y yo le pegaré a él. Hay una recompensa de 25.000 Corona