Después de 33 años de presencia en la noche madrileña, la discoteca Pachá abandona la capital. Según ha avanzado a EL PAÍS una portavoz de la empresa, Ricardo Urgell, fundador y CEO del Grupo Pachá, alega "diferencias en la gestión" con su franquiciado en la capital, Pedro Trapote, para retirarle el uso de la marca. Trapote, propietario del Teatro Barceló en el que se ubica el club, lo mantendrá abierto, pero tendrá que buscarse otro nombre.