Difícilmente podían imaginar los clientes del fisioterapeuta italiano Roberto Benatti, que su médico los drogaba y violaba cada vez que acudían a una de sus sesiones, que podían llegar a costar hasta 250 euros. La policía italiana, sin embargo, lo ha detenido e ingresado en prisión acusado de haber violado a unos cincuenta hombres, todos pacientes suyos, y de ejercer sin título, según han informado hoy fuentes de las fuerzas de seguridad transalpinas.