"A ver, señores de ING Direct, si ya saben que todos vamos a acabar abriendo una Cuenta Naranja en su entidad bancaria, ¿por qué, oh, dioses, por qué nos torturan como nunca antes lo había hecho una campaña publicitaria con esos más que insoportables anuncios en los que alguien canta con pijo retitín "ya lo sabía" cuando le restriega por la cara a otro alguien que haya abierto un producto financiero de tan beatíficas propiedades?"