Las gitanas de Saintes-Marie-de-la-Mer andan estos días alteradas por lo que consideran un ataque del Ayuntamiento de la población. El alcalde, Rolland Chassain (de la UMP, el partido de Nicolas Sarkozy), ha decidido poner coto a la proliferación, a su juicio excesiva, de echadoras de la buenaventura, que en plena campaña turística pueden invadir por decenas las calles de la población. Algunas, razona el alcalde, con modos impropios, agresivos incluso, para con los turistas. "No se trata de perseguir a nadie, sino de acabar con los abusos....