Su primer destino fue Alemania, o más bien los aeropuertos germanos, donde permanecieron varios días retenidos, por culpa que la denominada 'tormenta de nieve del siglo'. Huyendo del frío, pusieron rumbo a Bali. Pero allí, en vez de los ansiados sol y playa, les esperaba un temporal de lluvias monzónicas. En la siguiente etapa de su circuito de desastres naturales: Australia, estuvieron acompañados por incendios forestales, inundaciones y un ciclón que les obligó a cambiar el hotel por un refugio. (...)