Desde finales del siglo XIX, la jurisdicción de la Isla de los Faisanes, un islote fluvial del río Bidasoa situado entre Irún (Guipúzcoa) y Hendaya (Francia), es rotatoria por periodos de seis meses. Este miércoles se ha producido la ceremonia por la que España controlará la isla, de 2.000 metros cuadrados, durante el próximo medio año.

La empresa guipuzcoana Porcelanas Bidasoa ha cerrado tras 75 años de actividad debido a la deuda acumulada en la última década, que supera los 15 millones de euros, aunque los sindicatos también ven tras esta decisión una importante operación urbanística.

Navarra y Guipúzcoa están desde ayer un poco más cerca. El arco de un nuevo puente se ha tendido entre ambos territorios salvando la trinchera del río Bidasoa y esta simbólica unión en la frontera de Endarlatsa fue ayer celebrada por autoridades de ambos lados de la muga. El presidente navarro, Miguel Sanz, y el lehendakari Juan José Ibarretxe presenciaron el acto de abatimiento de los dos semiarcos que forman el viaducto de Endarlatsa, uno de ellos colocado en tierras de Navarra y el otro en suelo vasco.