Buenas tardes, soy el usuario antes conocido como @guachindango. Antes de ser expulsado como un perro de aquí, y después de tantos años, me gustaría ejercer mi derecho a réplica, si es que eso se estila todavía. Vaya por delante que no voy a intentar mendigar mi readmisión porque, sinceramente, esto ya no me divierte.

Aunque la competición estuvo reñida con un banner de contactos cerca de tu localidad, la gran prosa y buen uso de las palabras ente paréntesis y corchetes inclinó la balanza a su favor. Uno de los jueces del concurso declaro: "No había leído una cosa igual desde Laurence Sterne." Al no comparecer el Autor de tal magna obra, el premio en metálico será entregado al tercer clasificado. Un comentario en meneame completamente en mayúsculas.

Aunque nunca me ha atraído la carrera política, tengo que reconocer que la irrupción de nuevos partidos, que parecen querer darle un nuevo aire a este nuestro país, me animó a afiliarme a una formación política (no diré cual para que no me votéis spam).

Estaba absolutamente ilusionado con la idea de, en las próximas elecciones municipales, poder presentarme a alguno de los múltiples ayuntamientos españoles, con la confianza de poder trabajar mucho y bien para mis conciudadanos. Pero revisando mis tuits de hace varios años comprobé horrorizado que siendo un pipiolo había tuiteado un chiste de…

Lo dicho, hay por ahí un maldito usuario que no deja de acosarme y la administración no hace nada. Todo lo que escribo me lo vota positivo, aunque le insulte o lo que escriba sea una puta mierda. Lo mismo con las noticias que envío. El otro día me votó positivo una noticia sobre la reproducción de la lombriz común en el Amazonas, ¿que clase de enfermo vota positivo algo así? ¿Es que no tiene vergüenza?

Estoy hasta las pelotas porque su actitud me está haciendo fracasar como troll respetable. ¿Por qué actúa así? ¿Que le he hecho para que me persiga positivando de esa manera? ¿Está enamorado de mi? ¿Le salvé la vida en algún momento y no me acuerdo?