El presidente del gobierno español llamó a Trump para felicitarlo por su flamante victoria. El "diálogo entre vencedores", como lo llamó Rajoy, se truncó cuando Trump le dijo que no lo conocía y que no hablaba mexicano. Nuestro presidente, enfadado, amenazó con elecciones anticipadas, a lo que el presidente estadounidense le respondió con una amenaza de extradición a TIjuana.