Los jueces afirman que no está garantizada la seguridad de los espectadores. El Gobierno recurre la decisión y trata de que el amistoso del domingo se juegue en otro estadio de la ciudad.

Vergonzoso espectáculo el vivido en La Palma del Condado en el encuentro entre los locales y el filial del Xerez. Ambos conjuntos se jugaban sus opciones de ascenso a Tercera División pero el partido acabó suspendido por una batalla campal que se originó en la segunda mitad. Pasado el minuto 61 de partido y con el marcador favorable a los locales por un tanto a cero, una discusión entre el portero onubense y el xerecista Emaná originó la pelea. Al parecer insultos racistas al jugador azulino iniciaron una pelea que acabó con seis expulsados.