El sábado 19 de octubre arranca el quinto Open de Tenis de Valencia, el tercer torneo –tras el Masters de Madrid y el Conde de Godó de Barcelona- más importante de España. Nada extraordinario, más allá del empaque deportivo del evento, si no fuera por la aportación del contribuyente valenciano a su celebración: 18 millones (15 millones más IVA) en cinco años.