El juez ha ordenado el archivo de la causa, pues considera que los hechos denunciados por el Colectivo Manos Limpias “no son constitutivos de infracción penal”. Basa su decisión en que en 2009 se produjo otra pitada en otra final con los mismos contendientes en Mestalla. Debido a la similitud entre ambos casos, el juez Andreu considera que son “íntegramente aplicables los razonamientos entonces expuestos” por la Fiscalía, en los que se consideraba que “la libertad de expresión es la piedra angular de los principios de la democracia”.