La fiscalía de Múnich ha acusado formalmente de soborno al patrón de la Fórmula Uno, el británico Bernie Ecclestone, por haber pagado supuestamente 44 millones de dólares a un antiguo directivo del banco público bávaro BayernLB, según informó hoy la agencia alemana de noticias DPA.

Las autoridades portuguesas le investigan por pagar 2.000 euros para obtener de forma ilegal el carné de conducir. Afrontaría pena de cárcel.

Unos meses. Ése el tiempo que podría quedarle a Bernie Ecclestone en la Fórmula 1. La fiscalía de Múnich ya ha completado la investigación preliminar por la acusación de presunto soborno a un banquero alemán -Gerhard Gribkowsky- durante la venta de los derechos de la F1 a CVC en 2006, y en las próximas semanas anunciará si sigue adelante con los cargos de corrupción y soborno, aunque el diario Südeutsche Zeitung adelantó ayer que los fiscales han pedido su imputación.

Antonio Salamanca debutó como ojeador en el modesto Alès, recomendando el fichaje de un tal Franck Ribéry, jugador entonces desconocido del US Boulogne.

La fiscalía de Múnich ha completado una investigación sobre el patrón de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone. El hecho es que Ecclestone sobornó presuntamente a un banquero alemán en un negocio en el que Gerhard Gribkowsky, un prestamista de BayernLB, que ya ha sido encarcelado por evasión de impuestos, vendió una participación del 48 por ciento de una sociedad de la Fórmula 1 a CVC, un nuevo inversor de capital privado que Ecclestone quiso ver como nuevo accionista.

El brasileño recibió “sobornos” de una empresa de venta de derechos deportivos, dice informe, cuyos resultados obligaron a la renuncia de Joao Havelange como presidente honorario de la FIFA.