El Gobierno rechaza conceder el estatuto de apátrida a las , que tienen pasaporte palestino, porque la legislación exige que ningún país reconozca su nacionalidad, y en Europa ya son Suecia y cinco países más los que sí reconocen que el territorio ocupado es un estado. La Audiencia Nacional falla en contra de estas dos hermanas y aprueba las razones del Ministerio de Interior, que las obligarán a regresar a Palestina, país de origen de su padre, o a la región del Golfo Pérsico donde nacieron y se criaron.