En los últimos años salir a correr se ha puesto de moda, por eso, una carrera de 400 metros no parece ser muy exigente, incluso para aquellos que no han corrido en su vida. Pero si esta corta distancia la tienes que hacer subiendo la colina donde se encuentra el trampolín del salto de esquí, las cosas se complican un poco, ¿verdad?