Actualmente, en Japón, hay más de 2 millones de profesionales que se dedican a la atención geriátrica y calculan que, en 2025, las necesidades se acrecentarán y este número se duplicará hasta llegar a los 4 millones. Por eso desde 2013, el gobierno está proporcionando ayudas económicas a las empresas que desarrollen robots "geriatras". La idea es que estén listos en 2016 y que cada unidad cueste unos US$ 1.000, aunque se podrán alquilar a un precio inferior, según informa Xataca.