Los lápices y los cuadernos descansan a ciertas horas del día en esta clase de preescolar de Dunkerque, Francia. Los párvulos tienen un nuevo juguete: la tableta. Desde principios de año, la maestra les enseña a descubrir Twitter, una manera lúdica de aprender. Jean-Roch Masson, profesor de la escuela: “He observado y los padres lo han constatado, también, que los niños se hacen cargo de su propio aprendizaje, se vuelven autónomos.”