Mientras que muchos ya nos tronamos los dedos para que llegue la quincena, este niño que ni siquiera sabe para qué es el dinero –bueno, sabe, pero no lo disfruta a nuestra “nivel”- se embolsa anualmente 1.3 millones de dólares… Toda esa lana sólo por ofrecer en YouTube su crítico punto de vista a juguetes…

Ni youtubers, ni nada. El sector del videojuego ya ha madurado y lo que necesitan sus usuarios es educación.

La mujer que se hizo famosa por vomitar canela haciendo el Cinnamon Challenge, una Youtuber de moda y otro de actualidad van a entrevistar... a Barack Obama. Sucederá en menos de media hora en la Casa Blanca. Las tres "celebrities" de YouTube podrán mantener una conversación cara a cara con el presidente de los Estados Unidos y se retransmitirá a todo el mundo.

Sorprende tendencia infantil mostrada por la lista de los videos más visto en Youtube durante el 2014, donde videos como Pocoyo, Cantajuegos y Peppa Pig se cuelan en el primer, segundo y noveno puesto respectivamente. Además esto puede ser sorprendente teniendo en cuenta que la lista de Top 10 Canales en España está dominada, casi por completo, por canales de temática "Gamer". googleespana.blogspot.com.br/2014/12/youtuberewind-2014-celebrando-lo-

La cifra es aún más interesante cuando además le sumamos un factor adicional: las mujeres por encima de 18 años ya representan un porcentaje de la población “jugona” en Estados Unidos superior al de los chicos por debajo de los 18 años, que precisamente era un grupo demográfico clave para las desarrolladoras de videojuegos.

Una reciente encuesta en Gamasutra a 141 Youtubers estadounidenses está dando muchísimo que hablar esta mañana de lunes. Según los resultados del cuestionario anónimo, un buen número de estos jugadores tan populares en la red de vídeos recibe dinero de editoras de videojuegos para que se hable de sus títulos.

YouTube es el tercer portal de Internet con más visitas del mundo, sólo por detrás de Google y de la archipopular red social Facebook. Cada mes, sus más de 1.000 millones de usuarios únicos consumen más de 6.000 millones de horas de vídeo. Unas cifras estratosféricas que dan cabida a una nueva profesión: los youtubers.