Decir que los drones han venido para quedarse ya no tiene sentido a estas alturas. Ya están aquí y, para muchas de las operaciones militares, se están volviendo un elemento insustituible. Todos tenemos en mente los grandes drones de vigilancia, los que van armados con misiles y los famosos drones ‘suicidas’, tan utilizados en el reciente conflicto entre Armenia y Azerbaiyán. Pero si hay una carrera hacia drones cada vez más grandes y armados, hay otra no menos importante que tiende precisamente a todo lo contrario: hacerlos cada vez más pequeño

A los Uru-Eu-Wau-Wau se les conoce como el pueblo del águila arpía por su tradición de utilizar las enormes plumas del ave para hacer flechas de caza y tocados

Lleva por nombre CRACUNS (Corrosion Resistant Aerial Covert Unmanned Nautical System) y probablemente deje completamente obsoletos los periscopios convencionales de los submarinos. Se trata de un dron que puede despegar desde el agua incluso tras pasar meses oculto bajo su superficie. Su uso es doble. Por una parte puede despegar desde un submarino sumergido y hacer las veces de explorador sin necesidad de arriesgar el vehículo nodriza. Por otro lado, puede permanecer completamente sumergido y oculto durante largos períodos de tiempo.

Los ladrones al parecer se han percatado de las múltiples posibilidades que brinda la tecnología de las aeronaves no tripuladas (UAV’s por sus siglas en ingles) y han decidido sacarle todo el provecho posible.

En medio de la evolución de la guerra aérea y una mayor dependencia de los drones, Rusia ha estado exhibiendo el S-70 Okhotnik-B desde 2017, con una producción programada para comenzar a principios de este año. Las capacidades del Okhotnik son sustanciales, equipado para llevar una gama de armamentos que incluyen bombas de calibre 250 y 500, bombas guiadas y no guiadas de hasta 1.000 kg, así como varios misiles aire-tierra y aire-aire. Su alcance operativo se ve mejorado por el motor a reacción AL-31, el mismo utilizado en el avión de combate S

En un campo a las afueras de Kiev, los fundadores de Vyriy, una empresa ucraniana de drones, trabajaban hace poco en un arma del futuro. Para mostrar cómo funcionaba, Oleksii Babenko, de 25 años, director ejecutivo de Vyriy, se subió a su motocicleta y recorrió un camino de tierra. Detrás de él, lo seguía un dron, mientras un colega monitoreaba los movimientos desde una computadora del tamaño de un portafolio.

¿Crees que tu móvil te espía para recomendarte publicidad en redes sociales? En este vídeo vamos a llegar al fondo de la cuestión.

En una entrevista el artillero responde « Sólo se necesitan 60 segundos para desplegarse y 40 segundos para escapar. El sistema de puntería es automático, lo que le confiere una precisión extraordinaria.", él añade. De hecho, los ejércitos rusos han hecho de la destrucción de los Caesars una verdadera prioridad, no dudando en utilizar drones Lancet, e incluso cohetes de corto alcance y misiles balísticos (OTRK), “ Estos obuses franceses se cobraron una gran cantidad de vidas de artilleros rusos.“, Concluye.

Entre las posibles aplicaciones, sugieren que podría ser utilizado para monitorear la vida silvestre, por ejemplo, saltando entre ramas altas en los árboles. También podría utilizarse en zonas de desastre, ayudando en evaluaciones y encontrando sobrevivientes, o como monitores agrícolas, saltando de planta a planta probando suelo y niveles de humedad.

Ucrania ha lanzado con éxito su primer escuadrón de drones inteligentes capaz de seleccionar y fijar objetivos de forma totalmente autónoma, destruyendo un gran número de unidades rusas

(...) Los drones, los programas informáticos de geolocalización, los programas espía y otras herramientas similares son emblemáticas de una nueva serie de colaboraciones entre las grandes empresas tecnológicas y los organismos de defensa. En los últimos veinte años, el Departamento de Defensa y diecisiete organismos gubernamentales de los Estados Unidos que, en conjunto, son conocidos como la comunidad de inteligencia estadounidense, han intentado captar la innovación tecnológica en su origen: Silicon Valley.