Una investigación centrada en las áreas y conexiones de nuestro cerebro revela que personas adictas al tabaco fueron capaces de dejarlo y superar su dependencia tras sufrir un ictus o un derrame cerebral. Los trastornos por consumo de sustancias (TCS) son enfermedades que afectan al cerebro y al comportamiento de una persona, lo que influye en su capacidad para controlar sus deseos de consumir ciertas drogas. Entre ellas se incluyen las legales, como el alcohol o el tabaco, pero también las ilegales, como la heroína, el éxtasis o las metanfetam