Reservó una habitación en uno de los hoteles del centro Oviedo, tenía 35 años y acudió con la intención de quitarse la vida. Es el caso de la mujer, leonesa nacida en 1986, hallada muerta este miércoles después de ingerir, presuntamente, un bote de pastillas en compañía de dos amigos más. Uno de ellos, un hombre de unos setenta años, que avisó a la Policía Nacional en un hecho que se investiga como 'suicidio asistido'.