Hay bebés y bebés, pero por lo general los seres humanos tienden a llorar en sus primeros meses y años de vida. Lo saben bien los padres y las madres y también lo saben, en ocasiones, sus vecinos. Es algo inevitable pero hay vecinos más y menos comprensivos con el funcionamiento de la vida.Un padre, Nacho Duque (@duque_nacho), ha contado su experiencia con un vecino que le ha dejado varias notas quejándose por los llantos de su hija de 19 meses. En un hilo de Twitter explica punto por punto y con ironía que él es el primer interesado..