La primera piedra de Usansolo la ha colocado Agustín Aizpuru. A efectos prácticos, es casi el alcalde de esta localidad vizcaína. Lo es gracias al acuerdo entre PSOE y PNV para la investidura de Pedro Sánchez. Aunque el Gobierno central rechazó anteriormente la desanexión de este barrio de Galdakao, que quería tener un ayuntamiento propio, porque no alcanzaba -aunque por los pelos- los 5.000 habitantes, la situación ahora es bien distinta. Esta es la cifra mínima que exige la ley para constituirse como municipio.

Jeltzales y socialistas han registrado una proposición no de ley en el Parlamento Vasco para denunciar la “humillación” a la que el ayuntamiento de la localidad somete a las víctimas del terrorismo y de vulneraciones de derechos humanos.

Los grupos parlamentarios de PNV y PSE-EE han pedido al alcalde de Galdakao, Iñigo Hernando (EH Bildu), que retire del listado de víctimas a quienes fueron miembros de ETA.

Fernando Izaguirre, ex alto cargo del Gobierno Vasco que ha dimitido por presuntas irregularidades, utilizó su cargo anterior en el Ayuntamiento de Galdakao para ceder al servicio de salud una nave industrial en propiedad del consistorio, donde se pretendía ubicar el almacén de la Unidad de Farmacia Sociosanitaria para distribuir medicamentos en las residencias para mayores. Ocurrió en tiempos de Jon Darpón, obligado a dimitir por el “escándalo de las OPE”.

La plataforma electoral Usansolo Herria se ha reunido con los representantes políticos en la Juntas Generales de Bizkaia para pedir "apoyo" y "voluntad política" en su lucha por ser el municipio vasco 252