“El insulto, la descalificación, las estupideces, ‘de padre médico, comunista, si, pero médico’, el linchamiento, la reacción a las opiniones contrarias sin dar una sola respuesta a dichas opiniones, la condescendencia insoportable del que se cree por encima de los demás…las hordas reaccionarias de Podemos, tan reaccionarias como las de la peor derechona, confirmando mis sospechas. He estado, y estoy, al lado de los oprimidos desde los 17 años, mucho antes de “haber bebido mucho Dimple o Cradhu”.He pateado la calle, las fincas de los..."