El PSOE ha dicho basta ya a los aquelarres fascistas frente a la sede de Ferraz. La sede socialista lleva dos meses siendo rodeada y acosada por una horda de energúmenos que ya no tratan de ejercer su legítimo derecho a la libertad de expresión, sino que pretenden coaccionar, amedrentar y doblegar a un partido con el que no están de acuerdo. Lo que está pasando en Ferraz no es democracia, no puede serlo desde ningún punto de vista lógico, sino vandalismo, gamberrismo, matonismo político en la peor tradición del guerracivilismo español...