Telefónica tiene que estar muy mal. Su balance da penica, y eso que está maquillado. Lleva tiempo dando su famoso dividendo a cargo de no de beneficios, sino de deuda. Acaban de bajar su solvencia, pierde centenares de miles de clientes cada mes... y hoy van y venden uno de sus activos más estratégicos.
Pero todas estas alarmas no son nada comparadas con mi experiencia de la semana pasada. Había dos errores en sendas facturas de fijo y movil de mi pequeña empresa... lo normal, por otra parte. Llamo al 900 10 10 10, primero para una cosa y luego para la otra... y me atienden dos personas en castellano, con más de dos neuronas, que me entienden a la primera, me dan la razón en un minuto y me devuelven el dinero sin problemas... todo ello en menos de 5 minutos!¡Dos personas diferentes!