Al examinar miles de poblaciones de casi 150 especies de peces, los investigadores muestran que, contrariamente a la opinión predominante, los cambios rápidos de distribución coinciden con disminuciones de población a gran escala. Según el estudio, en promedio, un desplazamiento hacia los polos de 17 kilómetros por año puede resultar en una disminución del 50% en la abundancia de las poblaciones