España está llena de fascistas, pero los peores fascistas no son los que votan al PP, a Ciudadanos o a VOX, sino los que utilizan la palabra "fascista" para fustigar a todo el que piensa diferente. Son fascistas protegidos por el poder político de la izquierda, que cada día se hace más radical, arbitrario . Ellos se sienten con autoridad moral para acusar a los demás de fascistas, pero en realidad son ellos los verdaderos fascistas, conocidos porque sus almas rezuman envidia, rencor, odio y deseos de violencia contra los que son distintos