El colectivo de personas privadas de la libertad ("presos", debemos ponerlo con comillas para evitar demandas) denunció a un actor por hacer el papel de asesino en una película porque "no es un asesino de verdad". El colectivo se sintió ofendido y comenzó también una campaña de boicot contra la película. "Yo estoy privado de mi libertad por matar realmente a alguien, no como ese actor... ¡cuando salga lo mato!" dijo un miembro, tras lo cual amenazó con matar a este periodista si no ponía en la nota que "fue un chiste". El actor, que también pidió que no lo nombraramos bajo amenaza de demadarnos, está pensando en renunciar a dicho papel y pedirle al director de la película que lo deje hacer de "un hombre que le pela el pene a alguien" porque es urólogo originalmente de profesión. Esto se suma al caso de una actriz de Hollywood que renunció a hacer el papel de transgénero y al de una española que fue despedida por estar embarazada. En este caso no tenía el papel de embarazada pero se temió un boicot de mujeres embarazadas.
Bolsonaro en Brasil. Trump en EEUU. Rusia en Putin. Perdón, Putin en Rusia. Lukashenko en Belarús. Y el colmo: el kirchnerismo de nuevo en Argentina. La ONU y varios países del primer mundo occidental dejarán de creer en la democracia como la conocemos. Como dice el dicho "no hay más que hablar cinco minutos con la gente para estar a favor de una dictadura".
Se puede decir que comienza a ganar fuerza el modelo político autoritario de Rusia y China, entre otros, que desprecia la democracia "liberal". Para ello ponen un curioso ejemplo: Merkel en Alemania lleva ya 15 años. La misma persona liderando un país tanto tiempo y "le va bien". Varios jefes municipales y provinciales en muchos países incluso llevan más años que Putin en el poder en sus respectivos territorios.
La idea es aspirar a que únicamente Alemania y Francia tengan democracia. El resto del mundo occidental personas apoyadas por "notables" y estos países.
Al final de un turbulento e histórico proceso electoral, los estadounidenses que aún no lo han hecho deciden hoy quién quiere que dirija la nación.
El Juzgado de Primera Instancia número 12 de Madrid ha admitido a trámite una insólita denuncia contra la plataforma Menéame S.L., acusada de un "crimen de diseño" relacionado con el lanzamiento de un banner promocional de su nuevo buscador. Según los demandantes, el diseño "ultracolorido, recargado y de mal gusto" constituye una ofensa visual grave y atenta contra la dignidad estética de los usuarios de la plataforma.
menéame