Los astrónomos han descubierto la manera de hacer el más poderoso imán del universo. Todo lo que necesita es dos estrellas masivas que orbiten una cerca de la otra de modo que una robara gas de la otra, provocando que el ladrón gire tan rápido que su campo magnético empequeñezca al de la Tierra en 100 billones de veces. El hallazgo ofrece una nueva perspectiva sobre cómo surgen algunas de las estrellas más pequeñas pero más extraordinarias de la galaxia. Los magnetares son una raza especial de los púlsares, que son estrellas de neutrones